El sol ha sido siempre la principal fuente de energía de la tierra y los avances tecnológicos que hemos ido consiguiendo, sobre todo en los últimos años, han transformado la energía solar en una de las más eficientes y económicas del sector de las renovables. Y si a esto le sumamos que Andalucía es tierra de sol, se convierte en una de las opciones más elegidas por los consumidores.
Hay diferentes formas de aprovechar la energía solar, pero sin duda las más famosas y usadas son dos. La energía solar térmica, que transforma las radiaciones solares en calor, y la energía solar fotovoltaica que convierte la radiación solar en energía eléctrica. Esta última es mucho más interesante por poder ofrecer una cobertura eléctrica integral en el hogar o empresa, y es la protagonista de esta entrada al blog.
10 ventajas de la energía solar fotovoltaica
1. Es, por definición, una fuente inmutable e inagotable de energía.
Según los expertos el sol no vivirá eternamente pero aún le quedan 4.000 o 5.000 millones de años para volverse inestable. Por lo que en escalas temporales de nuestro interés estará siempre ahí, es inagotable.
Y además es abundante. Aunque por la forma esférica de la tierra y la presencia de atmósfera se reduce casi diez veces la potencia irradiada del sol, con solo recoger el 6% de la energía solar ya habría suficiente pare satisfacer la necesidades energéticas de la humanidad.
2. El sol llega a todos los lugares. Esto hace que se pueda usar en cualquier punto del planeta, ofreciendo una solución perfecta de energía en lugares que falte infraestructura o conexiones, como pueden ser zonas aisladas, rurales, remotas o de difícil acceso.
3. Solución energética ajustada. La energía solar fotovoltaica tiene la virtud de poderse escalar en función de las soluciones energéticas que se busquen. Desde una sola persona para su propio consumo hasta, grandes plantas en las zonas más soleadas del planeta. Todo depende del número de paneles que se instalen. Esta facilidad no existe en otras muchas energías renovables.
4. Se almacena o se vuelca a la red eléctrica con facilidad. El desarrollo de baterias ha hecho posible poder utilizar la energía solar fuera de las horas de sol de una forma eficiente y fiable. Estas baterías pueden ser propiedad del usuario (lo que le permitiría ser energéticamente autónomo) o este contratarla de forma virtual con alguna de las muchas compañías eléctricas que ya la ofrecen.
Su capacidad de poderse volcar a la red eléctrica también permite a los ciudadanos y empresas colocar en el mercado el excedente de energía producido, garantizando no solo un ahorro, sino también una renta.
5. Genera empleos verdes. Según IRENA, la Agencia Internacional para las Energías Renovables, en 2019 se crearon 3,8 millones de puestos de trabajo en torno a esta industria. Y se prevé que para el 2050, momento de máximo auge de las renovables, serán 22 millones de empleos a nivel mundial.
De todas formas está claro que es la que más empleos genera para ingenieros, constructores, instaladores y mantenedores de centrales. Es una oportunidad de inversión para familias, empresas y gobiernos y eso es un impulso para la economía.
6. Es silenciosa. Comparada con otras fuentes renovables y por supuesto, respecto a un sistema basado en combustibles fósiles es extraordinariamente silenciosos los dispositivos que la recogen por lo que se puede instalar en cualquier contexto sin producir contaminación acústica.
7. Con escaso mantenimiento. Durante su vida útil que es de 20 a 25 años, las necesidades de mantenimiento son escasas, alguna limpieza periódica y poco más.
8. Verdes hasta el final. Los paneles al ser retirados son recuperados, reciclados y reutilizados nuevamente reduciendo al máximo el impacto medioambiental de esta tecnología.
9. Una tecnología madura. Sólida y confiable, esta tecnología nos ofrece soluciones más que satisfactorias en fiabilidad, durabilidad y rendimiento. Desde que comenzó su desarrollo el siglo pasado cada vez las células fotovoltaicas tienen mayor rendimiento y su precio es más económico y esto hace que esta energía sea cada vez más asequible y disponible.
10. Protege a nuestro planeta del cambio climático. Hemos dejado para la última una de las razones más importantes. Usar los rayos solares como fuente de energía nos permite reducir al máximo los combustibles fósiles, eliminando las emisiones de gases de efecto invernadero.
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